Dios Visita a su
Pueblo
Nuestro mundo está lleno de gente humilde,
que vive en oscuros pueblecitos, y sin embargo algunas personas como ésas han cambiado el curso de este mundo.
Dentro de la historia de la Iglesia
honramos hoy a la primera persona que procede de ese medio ambiente ordinario.
Una frase sencilla suya, un humilde
“Sí”, cambió el curso del mundo y de la futura Iglesia.
Con la canción popular preguntaremos: “¿Quién
será la mujer…?” Ella es María.
Su SÍ a Dios, su “Heme aquí”, le dio a
ella y a nosotros a Jesús, el Hijo de Dios.
Ello hizo posible el “Aquí estoy, vengo
para hacer tu voluntad” de Jesús.
El SÍ
de María y el de Jesús nos llama a nosotros y a toda la Iglesia hoy a
dar nuestro SÍ incondicional a Dios.
Pidamos en la eucaristía que podamos unirnos a Jesús y a María en su
SÍ.
Y de ese modo podremos cambiar el curso
del mundo hoy.