Dios es Gracia
Dios
es escandalosamente justo y bueno, porque Dios es gracia.
Es
tan bueno que a veces no lo podemos entender.
¿Por
qué es tan indulgente con pecadores públicos y hasta famosos?
Pero
nos olvidamos de lo indulgente que es con nosotros mismos, también pecadores.
Abramos
nuestros corazones a su bondad y misericordia.
Él
nos da sin que le pidamos. Y nos lo da todo de balde.
Da
con mayor riqueza de la que nosotros nos atrevemos a esperar.
Tanto
el primero como el último reciben su amor. Tanto el primero como el último
están invitados a su mesa.
Unámonos
a Jesús en acción de gracias.