17 agosto, 2012

DOMINGO 20° DEL TIEMPO ORDINARIO



La Eucaristía está en la Médula de Nuestra Fe

Sabemos que la verdadera medula de nuestra fe es que el cuerpo de Cristo se quebró por nosotros en la cruz, para que derramar su sangre por nosotros, pero que resucitó de entre los muertos y está vivo para siempre. Para nosotros, el modo más profundo de participar en su muerte y resurrección es la Misa, la eucaristía que ahora celebramos. Aquí recibimos el cuerpo de Cristo como nuestro alimento. Ahí la sangre se hace presente como derramada para perdonar nuestros pecados y para llenarnos con la vida, fuerza y alegría de Jesús. Celebremos esta eucaristía con gratitud, porque aquí el Señor se entrega a sí mismo totalmente para nuestra salvación.