Soy Yo, Que Me Entrego a ustedes.
Cuando una persona está a punto de morir
y da un mensaje de despedida a sus familiares y a sus amigos, sabemos que esas
palabras salen del corazón, y nunca las olvidamos.
En la víspera de su muerte, en la Última
Cena, Jesús dijo: “Éste es mi cuerpo entregado por ustedes; esta es mi sangre
derramada por ustedes. Hagan esto en mi memoria”.
En la última cena, como en la cruz,
Jesús se dio totalmente a sí mismo, para que nosotros vivamos, y nos pidió que
hagamos nosotros lo mismo, para que otros vivan.
Celebramos este sublime misterio en cada
eucaristía.