09 febrero, 2014

DOMINGO 5° DEL TIEMPO ORDINARIO


Evangelizar es dar sabor 
a la vida de las personas


Cuando hablamos de evangelizar casi siempre lo entendemos en clave doctrinal: llevar la doctrina de Jesucristo contenida en el catecismo de la Iglesia.

Evangelizar no significa solo anunciar verbalmente una doctrina, sino hacer presente en la vida de las gentes la fuerza humanizadora, liberadora y salvadora que se encierra en el acontecimiento y la persona de Jesucristo. 

Para ello es necesario contar con personas que sean testigos vivientes del evangelio en su vida diaria, en su familia, en su lugar de trabajo, en su barrio, en la sociedad civil. “Personas capaces de sanear esta sociedad introduciendo en ella honestidad… que no se dejen corromper por la ambición del dinero, ni por el atractivo del éxito fácil”. 

Personas que desarrollen “la solidaridad responsable frente a tantos corporativismos interesados”; personas que introduzcan compasión en una sociedad despiadada que parece reprimir cada día más la civilización del corazón”. 

¿No van por ahí los mensajes del Papa Francisco que quiere apuntar una nueva primavera para la Iglesia, para las religiones y para el mundo?



BOLETÍN DE LA DIÓCESIS DE PUNTA ARENAS