Fiesta del Bautismo del Señor
En la Navidad,
Jesús se manifestó como un niño, pero era ciertamente el Hijo de Dios.
En la fiesta de
Epifanía se manifestó a sí mismo a los gentiles como el Salvador de todas
las personas y de todos los pueblos.
Hoy, en la
fiesta de su Bautismo, se nos revela como el Hijo amado intensamente por el
Padre, acogiendo al Espíritu Santo que viene a morar en él y a guiarle en su
nueva misión pública.
Ahora ya puede
comenzar abiertamente su misión. Este domingo pedimos al Señor que nos haga
conscientes de cómo también nosotros, por medio de nuestro propio bautismo,
somos hijas e hijos queridos del Padre, y cómo el fuego del Espíritu puede
inflamarnos para continuar la misma misión de Jesús.